5 de agosto de 2024

Participación ¿rusa? en los Juegos Olímpicos de París 2024

Wilder Márquez Romero

Abogado, UCAB (2010). Especialista en Derecho del Trabajo, UCAB (2020). Certificación en Derecho Deportivo, Centro Educativo Latinoamericano de Florida Global University (2020)

La relación Rusia-Comité Olímpico Internacional en los últimos años, ha sido cuando menos, áspera: en los Juegos Olímpicos de París 2024 no hay participación del Comité Olímpico Ruso (ROC, por sus siglas en inglés) por segundo evento consecutivo, por lo que sus atletas no podrán desfilar ni uniformarse con emblemas alusivos a ese país, así como tampoco podrán usar su bandera, ni sonará su himno nacional en caso de obtener medalla de oro.

 

Antecedentes

Los antecedentes recientes de esta relación áspera comenzaron en el año 2016, con la sanción impuesta por parte de la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF, por sus siglas en inglés) a la Federación de Atletismo de Rusia (FAR) por el escándalo de dopaje y en el cual se demostró que las Federaciones deportivas rusas, con apoyo del gobierno, ocultaron resultados positivos de dopaje de sus atletas. Esa conclusión derivó de la investigación realizada por la Agencia Mundial Antidopaje (AMA). Vale decir, que en 2014 la AMA ya había sancionado a la Agencia Rusa Antidopaje por su incumplimiento al control antidopaje de sus atletas.

Esta decisión de la IAAF fue objeto de arbitraje ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), el cual, mediante un breve proceso, en julio 2016 ratificó la exclusión de 68 atletas de los JJOO de Río 2016 por no cumplir con las reglas de competición de la IAAF.

Posteriormente, en agosto de 2016 el Comité Olímpico Internacional (COI) decidió que solo podían participar en los Juegos Olímpicos de ese año, aquellos atletas rusos con antecedentes de pruebas internacionales y verificables negativas de dopaje, adecuadas y fiables, toda vez que las pruebas realizadas internamente por Rusia no serían consideradas válidas. Asimismo, fueron descartados para participar aquellos atletas con antecedes positivos de dopaje, aun cuando hubieren cumplido su sanción. Bajo estas premisas, el COI extendió hasta 118 atletas la prohibición de participación de atletas rusos, por lo cual la delegación rusa pasó de 389 a 271 representantes.

Celebrados los JJOO Río 2016, las investigaciones continuaron, y en 2019, en virtud de la poca colaboración de la Agencia Antidopaje de Rusia, quien remitió información alterada a la AMA, ésta última impuso una sanción en contra de Rusia de organizar y participar en eventos deportivos internacionales durante 4 años. Esta sanción fue posteriormente rebajada a 2 años por el TAS, quien estableció en su Laudo, además, que solo podrán participar en los eventos deportivos que se celebren durante el período de la sanción (desde el 17 de diciembre de 2020 hasta el 16 de diciembre de 2022 de acuerdo con el Laudo), aquellos atletas que no hayan estado suspendidos previamente, es decir, que estuvieran limpios de dopaje, aunque no podrán utilizar uniformes con bandera o emblemas nacionales, ni será entonado su himno nacional[1].

En razón de la anterior medida, en los siguientes Juegos Olímpicos de Tokio 2020 (celebrados en el año 2021 por la pandemia de COVID-19), y también en los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín 2022, los atletas rusos que fueron habilitados para participar en dichas competiciones, previa aprobación del criterio de limpieza establecido en la decisión del TAS, lo hicieron bajo la denominación ROC, usando un uniforme neutral y sin que se entonara su himno nacional cuando obtuvieron oro olímpico, todo ello también en atención a la mencionada decisión del TAS.

 

JJOO París 2024

Cumplidas las sanciones impuestas a Rusia por el dopaje de Estado que les impidió participar con su delegación completa en los JJOO de Río 2016 y más aún, que les impidió participar como país en los JJOO de Tokio 2020, París 2024 será una continuación en la saga del país euroasiático como un paria en deportes olímpicos, pero por otras razones: la invasión a Ucrania.

En diciembre de 2022 el COI publicó la Declaración de la XI Cumbre Olímpica, en la cual asentó que decisión de la vasta mayoría de los participantes, de sancionar a Rusia y Bielorrusia por la flagrante violación de la Tregua Olímpica y de la Carta Olímpica, debido a ello, les fue impuesto como sanción, la imposibilidad de  organizar eventos olímpicos y que las banderas, himnos y colores de esos países, sean utilizados en los eventos deportivos en los cuales sus atletas participen.

Previa a esta decisión del COI, otros organismos deportivos ya habían sentado posición en sus respetivas competiciones, como fue el caso de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) y la Unión de Federaciones Europeas de Fútbol​ (UEFA), quienes en fecha 28 de febrero de 2022, decidieron conjuntamente suspender de sus torneos “a todos los equipos rusos, tanto a sus selecciones nacionales como a sus clubes”. Con esta decisión, quedaron inmediatamente excluidas la selección masculina de fútbol del repechaje de la UEFA para clasificación a la Copa Mundial de la FIFA 2022, y la cual jugaría contra Polonia en primera ronda, y al Spartak Moscú de los 8vos de final de la UEFA Europa League, que jugaría contra el RB Leipzig.

Continuando con el tema olímpico, rápidamente en enero de 2023 el Comité Ejecutivo del COI estableció que los atletas de dichos países podrán participar en la cita olímpica, siempre y cuando lo hagan como Atletas Neutrales Individuales, y no como representantes de Rusia o Bielorrusia. Sin embargo, también estableció como criterio de elegibilidad a aquellos atletas que (i) no hayan apoyado la guerra en Ucrania, y (ii) hayan cumplido con las reglas antidopaje.

Debido a las anteriores condiciones de participación de atletas rusos, en marzo de 2023 el COI publicó una nueva declaración donde, con base a la Resolución de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) No. A/77/L.28[2], estableció la prohibición de cualquier forma de discriminación en razón del pasaporte del atleta, esto con la firme intención de evitar que, ante un clima tenso político-territorial, la participación de atletas rusos, bielorrusos e incluso ucranianos, se viera afectada por motivos extra deportivos, todo ello bajo el principio de que, si bien los Juegos Olímpicos no pueden prevenir guerras, si “pueden servir de ejemplo para un mundo en el que todos respeten las mismas reglas y respeten unos a otro”.

De manera que, ya estando perfilada la participación de atletas con pasaporte ruso en los Juegos Olímpicos de París 2024, y luego de publicarse la Resolución de Tregua Olímpica A/RES/78/10 por parte de la ONU (en la cual Rusia, por cierto, junto con Siria fueron las únicas abstenciones en la votación), en diciembre de 2023 el Comité Ejecutivo del COI publicó las “Condiciones de Elegibilidad”, donde se estableció que los atletas rusos podrán participar bajo la denominación de Atletas Neutrales Individuales. Con esta medida, la participación rusa será de 11 atletas, los cuales solo participarán en deportes individuales, quedando descartados aquellos que: (i) hayan apoyado la guerra contra Ucrania; (ii) los que se encuentren bajo contrato con equipos pertenecientes a las agencias militares o de seguridad del país, o (iii) quienes no cumplan con los controles antidopaje. Finalmente, serán 15 los atletas rusos quienes participarán.

Adicionalmente, los Atletas Neutrales Individuales no portarán los colores o bandera de su país ni se entonará su himno nacional, así como tampoco podrá estar presente ningún miembro oficial del gobierno ruso y bielorruso.

Debido a todo lo anterior, es pertinente recordar que el movimiento olímpico moderno fue creado hace más de 120 años por Pierre de Coubertin bajo la creencia de que el deporte podía ayudar a unir a las comunidades, e incluso, detener las guerras. Esos principios, aunque no el resultado, se han mantenido más o menos incólumes hasta la fecha, y es por ello que la vigente Carta Olímpica, y que será la que regirá los actuales Juegos Olímpicos, contempla entre sus postulados el favorecimiento de una sociedad pacífica y el compromiso con la dignidad humana.

Pero a su vez, también contempla la Carta Olímpica, muy al tenor de la postura de la ONU, el deporte como un derecho humano. Debido a ello, resulta ajustado a los principios olímpicos y a los postulados internacionales sobre derechos humanos, conseguir una fórmula para que aquellos atletas que cumplan con los requisitos de elegibilidad puedan participar en la cita olímpica, en el entendido que las decisiones de sus gobiernos no necesariamente responden a una posición propia del deportista, por lo cual, sería contrario a dichos principios que ellos se vean afectados por tales decisiones.

Por ese motivo, la presencia de atletas rusos y bielorrusos como Atletas Neutrales Individuales en los Juegos Olímpicos de París 2024, se presenta como una solución apropiada para la participación de dichos atletas, más allá de la no participación de su país en la competencia olímpica.

 

[1] CAS 2020/O/6689 World Anti-Doping Agency v. Russian Anti-Doping Agency. 17 de diciembre 2020: https://cdn.swimswam.com/wp-content/uploads/2021/01/CAS_Award_6689.pdf

[2] Denominada “El deporte como facilitador del desarrollo sostenible” de fecha 23 de noviembre de 2022.

 

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